Les convidaba un jugo que podía ser el último.
Volvemos a la normalidad y Ángeles nos cuenta la historia de Antonia Giampietro, una cordobesa que se dedicaba a seducir jubilados para luego robarles su dinero. Un par de veces el robo se le fue de las manos, y terminó arrebatándole la vida a dos de ellos.